El Real Madrid ha vivido grandes épocas en cuanto a
triunfos y grandes hazañas; comenzando por conocido como “El Madrid de Di
Stéfano”, que marcó la diferencia en Europa logrando las cinco primeras
Ediciones de la Copa de Europa a manos de jugadores como Gento, Puskas, Kopa o
el nombrado, Di Stéfano. Este ha sido el, para muchos, mejor equipo de la
historia del fútbol en cuanto a superioridad y longevidad, ya que aguantaron
“la Orejona” cinco temporadas consecutivas, además de otros títulos a nivel
nacional. Pocos años después apareció otro conjunto madridista al que nombraron
“El Madrid Ye-Ye”, debido a que algunos jugadores madridistas posaron con
melenas como las del grupo británico “The Beatles” en el diario Marca. Que
también ganó una Copa de Europa en 1966 con Amancio Amaro como estrella y
todavía con un veteranísimo Paco Gento. Una década después entró en escena “El
Madrid de los García” (el menos laureado de los nombrados hasta ahora), al que apodaron
así por la cantidad de futbolistas en la plantilla con el apellido García. Lo
máximo que consiguieron a nivel europeo fue una final de Liga de Campeones,
frente al Liverpool, en 1981 en la que cayeron por 1 a 0 después de un tremendo
error del lateral merengue Rafael García Cortés.
Y finalmente llegamos a la época madridista de la que
hablaré hoy, el conjunto conocido como “La Quinta del Buitre”. Como sabréis
este grandísimo equipo es aún hoy en día motivo de orgullo para los aficionados
del Real Madrid, no por sus grandes conquistas (que las hubo) sinó porque el
club apostó por algo en lo que todavía no había confiado plenamente, la
cantera. Cinco jóvenes futbolistas madridistas de cuna que hicieron más grande
al club y marcaron una época en el fútbol español cosechando cinco títulos
ligueros consecutivos. Un equipo de lujo que pese ha no poder triunfar en la
Copa de Europa, en la que quedó eliminado en semifinales en 1988 frente al PSV,
consiguió alzarse con dos Copas de la UEFA en 1985 y 1986. Míchel, Pardeza,
Martín Vázquez, Sanchís formaban la conocida Quinta, y la principal figura era
Emilio Butragueño (El Buitre). Todos ellos más futbolistas como Hugo
Sánchez, Schuster, Hierro, Gordillo,
Chendo ... formaban uno de los equipos más grandes de la historia del fútbol
español.
El apodo de la Quinta del Buitre se creó cuando el
Castilla se alzó con el titulo de Segunda División en la temporada 1983-84.
Pero durante esa temporada algunos jugadores como Martín Vázquez, Sanchís o
Butragueño fueron apareciendo en el primer equipo, Míchel tuvo que esperar otra
temporada para debutar. Pronto fueron haciendóse un hueco en el once inicial y
apartando del once a vetranos, Butragueño
y Míchel comenzaron ha dejar en el banquillo a Juanito y Santillana,
Sanchís a San José o Bonet y Martín
Vázquez y Pardeza a Del Bosque, Angel o
Gallego. Un cambio generacional de unos jóvenes con tanto o más talento que los
veteranos que tanto habían ganado però que tenían que aceptar que ya no tenian
el puesto asegurado. Todos los integrantes de la Quinta fueron piezas
importantísimas en el conjunto blanco exceptouno: Pardeza. Miguel Pardeza no
tuvo la confianza de los entrenadores y después de una campaña con la primera
plantilla se fue al Real Zaragoza dónde jugó a un gran nivel.
-
EMILIO
BUTRAGUEÑO: Emilio no solo ha sido uno de los mejores
jugadores de la historia del club blanco, es mucho más que eso, está
considerado casi como un dios del madridismo y del fútbol español en general.
Cuándo empezó a disputar en el filial blanco los seguidores le comenzaron a
llamar, Buitre a causa de su instinto goleador y su habilidad para desgarrar
defensas enteras con un simple movimiento sin balón. El alma de la Quinta, y
jugador clave en el Real Madrid durante una década. Un futbolista único al que
le faltó levantar la Copa de Europa para coronarse como uno de los grandes de
su época.
-
RAFAEL
MARTÍN VÁZQUEZ: Posiblemente el hombre que más calidad atesoraba
en aquel equipo, era un centrocampista increíble y con una técnica
privilegiada. El juego del equipo lo movían sus botas y su habilidad con la
pelota solía levantar muchos “olés” en el Bernabéu. Uno de los mejores en su
posición en el mundo fue indiscutible en el club blanco durante sus 10
temporadas como merengue, repartidas en dos etapas.
-
MANUEL
SANCHÍS: Fue el que más temporadas aguantó en el primer equipo con
un total de 18, también tuvo la oportunidad de levantar, como capitán, dos
veces la Liga de Campeones. Un central fuerte y con un perfecto juego aéreo,
veloz al corte y genial marcador. El “5” merengue tuvo especial prensa el día
de su debut debido a que su padre, Manuel Sanchís Sr., había sido un laureado
central blanco en la década de los sesenta. Uno de los jugadores con más
partidos disputados con el Real Madrid con más de 850 y el último en caer de
los cinco integrantes de la Quinta. Un ídolo del madridismo y con carácter de
capitán.
-
MÍCHEL: Uno de los mejores extremos del
mundo en su época, y indiscutible con la selección durante sus años al máximo
nivel. Míchel era un centrador sensacional, además de un gran regateador. Su
velocidad y sus pases a Hugo Sánchez eran una de las claves del equipo, fue
pieza clave en el Real Madrid. Su carácter y personalidad fuertes hacían de él
un futbolista muy carismático para su hinchada.
Pero en aquel histórico equipo merengue no solo
destacaban los jóvenes canteranos. Un equipo con veteranos como Chendo, siempre
seguro y buen marcador en el lateral derecho; Gordillo, uno de los mejores
futbolistas españoles de los ochenta en la banda izquierda como lateral o
carrilero, marcaba la diferencia por su velocidad y potencia; Paco Buyo, el guardameta gallego fue un seguro en la porteria
durante casi una década, y por último Juanito, la leyenda blanca que pese ha no
ser indiscutible, ya que la edad comenzó a pasarle factura, supo dar un empujón
a los más jóvenes.
También futbolistas extranjeros como Hugo Sánchez, el mexicano es uno de
los grandes goleadores de todos los tiempos y cinco veces Pichichi con el Real
Madrid, sus remates acrobáticos y remates imposibles forman parte del centenario club; Schuster, uno de los mejores futbolistas europeos de los 80’, estuvo
dos temporadas en el club, después de dejar el Barcelona, en las que ganó dos
ligas, y supo tomar las riendas del equipo en el centro del campo; y Jorge Valdano, el delantero argentino jugó a un muy buen nivel en las
cuatro campañas en las que se vistió de blanco, consiguiendo goles importantes.